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LECCIONES ESPIRITUALES


86. SERMÓN DE PATRIARCA MOISÉS EN DOMINGO DE RAMOS,
20.04.2008


 

El 6 domingo de la Cuaresma

¡En el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo!

¡Gloria a Jesucristo, queridos hermanos y hermanas!

Hoy celebramos el Domingo de Ramos. Esta fiesta marca el día cuando Jesús entró en Jerusalén, montando sobre un asnillo, (Juan XII, 12-19), a sabiendas que hoy es alabado, y mañana será crucificado.

Antes de entrar en Jerusalén, Él bendijo a Sus apóstoles a llevar un asnillo no desbravado. Y llevaron un asnillo. Los apóstoles no entendían que hicieron, sino obedecían a su maestro.

Cuando Jesús se montó sobre un asnillo, y llegó a Jerusalén, lloró amargamente y dijo: "Y te derribarán a tierra, y a tus hijos dentro de ti, y no dejarán en ti piedra sobre piedra, por cuanto no conociste el tiempo de tu visitación... "(Lucas, XIX, 44) - por cuanto no conocía el momento en que el Señor mismo entraba sobre un asnillo en Jerusalén. Lloró. ¿Por qué? Porque sabía que no le reconocen, y le crucificarán, porque la verdad no es amada en este mundo. Él predijo que "no dejarán en ti piedra sobre piedra" de Jerusalén. En efecto, después de 32 años no dejó piedra sobre piedra de Jerusalén. Período simbólico de tiempo de 32 años es casi la edad de la la vida terrenal de Jesucristo.

Sucedió así que los judíos capturaron soldados romanos y el emperador les pidió que dejar que estos soldados. Judíos prometieron a liberarlos, pero los mataron. Entonces el emperador envió su hijo, que era el comandante del ejército romano. Llegó a Jerusalén en la fiesta de la Pascua judía. Rodeó la ciudad y permitió entrar y salir de ciudad a nadie. En la fiesta en Jerusalén se congregaron cientos de miles de personas. Comenzó tal hambre que fue llevado 150.000 de cada puerta de la ciudad. Era cuatro puertas en la ciudad, de que llevaron los muertos por la noche. Y luego, sin razón aparente comenzó el incendio en Jerusalén. Todo estaba en llamas, y judíos huían de la ciudad, a las bayonetas de los soldados romanos.

Después, los soldados romanos regresaron a Roma. Y cuando les proclamaban la victoria, el comandante, el hijo del emperador, dijo: "No yo gané, me di cuenta de que la mano de Dios les castigó". Incluso los paganos se dieron cuenta de que los judíos fueron castigados por Dios mismo. Y queda claro por qué lloró Jesús, cuando miramos en el aspecto histórico de su profecía. Lloró y dijo: "Jerusalén no conociste el tiempo de tu visitación". Pero al tomar ánimo, entró en la ciudad santa de Jerusalén. En aquel momento decimos santa porque Jesús estaba allí, y en la realidad - Jerusalén profanada. Cómo Kyiv hoy es profanada - tiene cúpulas, tiene la santidad, pero en realidad están crucificando la cultura y la lengua de su pueblo están crucificando, crucifican a todo lo bueno. Tanto aquí como allí - para la riqueza, para la política.

Y cuando Jesús entró en Jerusalén, el pueblo le alababa. ¿Por qué alababa? Porque recibieron la noticia de Él: llega Él que sanó a un hombre muerto - resucitó a Lázaro. Y glorificaban a Jesús también porque los ángeles de Dios en este tiempo eran cerca de la tierra y bendecían a Hijo de Dios, sabiendo de antemano de su gran sufrimiento, le inspiraban.

Podemos comparar con la Revolución Naranja de Ucrania en 2004, cuando muchas personas creían que el Señor mismo a través de Su gente iba a llegar al poder, que todo iba a cambiar. Cada pensaba que la justicia iba a venir por fin en este país, que no era la corrupción, y era un desarrollo espiritual en Ucrania. Y la gente llegaba a la plaza para encontar a un buen futuro para Ucrania. Y en este momento eran tantos ángeles que la gente no se sentía aún el frío. Y todos nos sentimos como una familia.

La gente en Jerusalén, rodeada de ángeles de Dios, eran felices. Ella glorificaba a Dios, sentía su presencia. Por eso decía: "¡Hosanna al Hijo de David," esto significa gloria en los altos a Jesús, hijo de David. -"Bendito el que viene en nombre del Señor ". Así glorificaban a Él, saludabanle con los ramos. Este es el honor más grande que se daba al hombre en la tierra. Tiraban sus vestidos a los pies de un asnillo en el que estaba sentado. La gente era felices. Todos se alegraban, pero eran entre ellos los malvados sacerdotes-judíos que vinieron directamente a Jesús y le dijeron: "Maestro, reprende a tus discípulos" (Lucas XIX:39), es decir: "¿Por qué te alababan? Hazles guardar silencio! ¿Por qué te alababan como si eres Hijo de Dios?"- Cosas como esas. Envidia y demonios les apolliban de dentro. Y Jesús les dijo: "Os digo que si éstos callaran, las piedras clamarían," (Lucas XIX:40). Porque era hora de gloria ante el gran sufrimiento, ante el sacrificio gran del Hijo de Dios. Y los malvados sacerdotes dejaron, y la gente seguía alabando a Jesús.

Está claro que si él era un político, se habría beneficiado esto y probablemente se habría sentado en el trono real. Pero no tuvo tal objetivo en aquel momento. El vino para ser crucificado, con el fin de eliminar los pecados de la humanidad, para Tierra pudiere existir un segundo, tercero mil años. Vino para nosotros pudieremos arrepentirse, tener la oportunidad de la salvación. Es decir, Él vino para que nos arrepintiéremos. Ya que Dios no quiere la muerte del pecador, sino arrepentimiento de cada uno de nosotros para que tengamos la vida eterna. Eso es lo que Dios quiere. Es decir, Hijo de Dios realizó un gran majestuoso papel en el universo por la salvación de la humanidad. Así que tuvo que sufrir. Él lo sabía. Aunque podría ser su rey, pero no quería eso, no era su tiempo aún para cambiar a la gente, la gente no cambiarían. Él tuvo que sacrificarse. La mayor víctima en el universo es el Hijo de Dios, el Creador del universo.

Y luego la gente exclamaba a Él: "¡Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor! ¡Hosanna en las alturas!! (Mateo, XXI: 9) - pero Él sabía que después de 3 días exclamarían: "¡Crucifícale, crucifícale". Él lo sabía. Entró en Jerusalén, y no actuó como un político, se comportó como verdaderamente Hijo de Dios. Y antes se comportaba como un Hijo de Dios, que comenzó a gritarle a la gente que comercía en el templo, que había negocios en la fe en Dios, y en el día de hoy vende cruces, los pedazos de llos cuerpos de los santos, iconos. Pues todo lo que es posible vender. En aquellos tiempos, vendía las palomas y cabras para sacrificar. Parece ser todo lo que uno necesita, pero ellos aprovecharon de eso y a Dios no fue eso agradable. Por eso Jesús volcó las mesas de los cambistas y gritó: " Mi casa, casa de oración será llamada; mas vosotros la habéis hecho cueva de ladrones " (Mateo, XXI:13)". Y todos cobraron miedo, porque veían la ira de Dios, que descendió a ellos a través de este hombre Jesús. Dios nunca se preocupaba por sí mismo, sino que se preocupaba por causa de la verdad, para que vino a la Tierra.

Entrada del Señor en Jerusalén. La gente glorificaba a Él, sintiendo a un nivel subconsciente que los ángeles alababan a Él. Sin embargo, no le glorificaba conscientemente, no entendía quién era, y que carga llevaba. Así que después de 3 días cuando judíos habían calumniado a Jesús, la gente gritó "¡Crucifícale, crucifícale! ..." (Juan XIX:15). Y las personas se llaman de engaňo fácilmente. No les condenen, porque también pueden Ustedes fácilmente sucumbir a las provocaciones contra su maestro fácilmente. Si uno piensa, "¿Cómo pueden condenar? No voy a hacer así", de inmediato hace así. Como el apóstol Pedro hizo cuando dijo: " Mi vida pondré por ti." (Juan XIII:37). Y Jesús le dijo: "O, Pedro - y Él le da a conocer como diablo trabaja - De cierto, de cierto te digo: No cantará el gallo, sin que me hayas negado tres veces...." (Juan XIII:38). Sucedió eso. ¿Entienden? Nunca apresuren condenar a alguien porque entonces Dios le dará experimentar eso por ustedes mismos.

Es muy difícil enseñar algo bueno a la gente. Pero es muy fácil enseñar engañar, mentir, inspirar hacer una ola de descontento - como lo hacen algunos políticos. Conducieron gente a una dirección y entonces a otra. La gente mira: "Bueno, ¿dónde está la resolución de problemas?" No. Ahora retrocedemos. La gente mira otra vez: "Bueno, ¿dónde está la resolución de problemas?" ¿Sí? Por eso no tenga confianza en los hijos de política, no hay salvación en ellos. La salvación es en la verdad, la verdad del Señor. La salvación va, si el Señor reinará sobre su pueblo de este mundo. Pero en la época de Jesús, diablo reinaba en el mundo, "el príncipe de este mundo" que quiso crucificar a Jesús. Reinaba a través del enriquecimiento, a través del convertir el templo de Dios en una casa de comercio - es decir, que ahora tenemos en realidad en Ucrania. Y que la Escritura prohíbe - el Antiguo y el Nuevo Testamento. Lo hacen eso en contra de las Escrituras mientras deciendo que son los cristianos, los ortodoxos.

Cuando en aňos 1990s el Señor me preguntó: "En tu opinión, ¿cuántos son cristianos en tu ciudad, donde son un cuarto de millón de personas? - Probablemente muchos. - No, dos o uno. "Cristianos son los que realmente entienden como salvarse cómo hacer buenas obras. Como salvarse para entrar en la vida eterna. Como hacer obras buenas. Como entender a la gente. Como tener la doctrina verdadera en su cabeza y en su corazón. Esto es la salvación.

Pero la gente vivía en la oscuridad, y después de tres días gritaba: "¡Crucifícale, crucifícale!"

Hoy llamo a ustedes, hermanos y hermanas, que no seamos las personas inconscientes, ya que mucho se ha dicho a ustedes y ustedes tienen que entender mucho. Si vamos a alabar a Dios, entonces mañana tratemos no gritar contra Él, "¡Crucifícale, crucifícale, crucifica la verdad!" Y luego tratemos ayunar para entrar dignamente en el gozo de la Resurrección del Señor.

¡Gloria a Jesucristo!

 

Apóstol (Filipenses, 4:4-9):

4

4 Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez lo diré: ¡Regocijaos!

5 Vuestra bondad sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca.

6 Por nada estéis afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer vuestras peticiones delante de Dios.

7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestras mentes en Cristo Jesús.

8 Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo digno, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo honorable, si hay alguna virtud o algo que merece elogio, en esto meditad.

9 Lo que también habéis aprendido y recibido y oído y visto en mí, esto practicad, y el Dios de paz estará con vosotros.

 

 

Evangelio (Juan, 12:1-18):

12

1 Entonces Jesús, seis días antes de la Pascua, vino a Betania donde estaba Lázaro, al que Jesús había resucitado de entre los muertos.

2 Y le hicieron una cena allí, y Marta servía; pero Lázaro era uno de los que estaban a la mesa con El.

3 Entonces María, tomando una libra de perfume de nardo puro que costaba mucho, ungió los pies de Jesús, y se los secó con los cabellos, y la casa se llenó con la fragancia del perfume.

4 Y Judas Iscariote, uno de sus discípulos, el que le iba a entregar, dijo:

5 ¿Por qué no se vendió este perfume por trescientos denarios y se dio a los pobres?

6 Pero dijo esto, no porque se preocupara por los pobres, sino porque era un ladrón, y como tenía la bolsa del dinero, sustraía de lo que se echaba en ella.

7 Entonces Jesús dijo: Déjala, para que lo guarde para el día de mi sepultura.

8 Porque a los pobres siempre los tendréis con vosotros; pero a mí no siempre me tendréis. Conspiración para matar a Lázaro

9 Entonces la gran multitud de judíos se enteró de que Jesús estaba allí; y vinieron no sólo por causa de Jesús, sino también por ver a Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos.

10 Pero los principales sacerdotes resolvieron matar también a Lázaro;

11 porque por causa de él muchos de los judíos se apartaban y creían en Jesús. La entrada triunfal

12 Al día siguiente, cuando la gran multitud que había venido a la fiesta, oyó que Jesús venía a Jerusalén,

13 tomaron hojas de las palmas y salieron a recibirle, y gritaban: ¡Hosanna! BENDITO EL QUE VIENE

14 Jesús, hallando un asnillo, se montó en él; como está escrito:

15“Fear not, daughter of Zion; behold, your king is coming, sitting on a donkey's colt!”

16 Sus discípulos no entendieron esto al principio, pero después, cuando Jesús fue glorificado, entonces se acordaron de que esto se había escrito de El, y de que le habían hecho estas cosas.

17 Y así, la multitud que estaba con El cuando llamó a Lázaro del sepulcro y lo resucitó de entre los muertos, daba testimonio de El.

18 Por eso la multitud fue también a recibirle, porque habían oído que El había hecho esta señal.

 




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